Introducción: El Papa Pío XI instituyó la solemnidad de Nuestro Señor Jesucristo, Rey del Universo en 1925. Hoy, en esta celebración que marca el final del año litúrgico, reconocemos la preeminencia de Cristo y oramos por el día en que la paz y la buena voluntad puedan vencer para siempre la guerra y la agresión.
Señor Jesús, reconcilias al mundo contigo - Señor, ten piedad.
Cristo Jesús, tu reino durará para siempre - Cristo, ten piedad.
Señor Jesús, tú eres el Mesías, nuestro Rey y nuestro Dios - Señor, ten piedad.
Sacerdote: En nuestras oraciones, invocamos a Jesucristo nuestro Rey para que responda a nuestras necesidades y a las necesidades de todas las personas del mundo:
1. Por el Papa Francisco, nuestro obispo Joseph Kopacz y todos los líderes de la Iglesia, para que miren a Cristo Rey mientras nos guían, al Cuerpo de Cristo, hacia nuestro destino final en el reino celestial. Roguemos al Señor.
2. Por los líderes de las naciones, para que aborden sus puestos de gobierno con humildad y gracia. Roguemos al Señor.
3. Por la sanación y la reconciliación en nuestras relaciones rotas, para que podamos atender el llamado al arrepentimiento y la redención. Roguemos al Señor.
4. Por la sanación de los enfermos y los confinados en cuerpo, mente y espíritu. Roguemos al Señor.
5. Por el descanso de las almas de los fieles difuntos. Por nuestros seres queridos y familiares fallecidos. Roguemos al Señor.
6. Por las oraciones que mantenemos en el silencio de nuestros corazones, por todas nuestras intenciones, dichas y no dichas. Roguemos al Señor.
Sacerdote: Dios misericordioso, te rogamos que nos concedas la gracia de elegir arrepentirnos de nuestros errores y perdonar a quienes nos han hecho daño. Presentamos nuestras oraciones por tu Hijo Jesucristo, nuestro Señor por los siglos de los siglos. AMÉN.
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